miércoles, septiembre 28, 2011

Por Todos los Medios Salve a Algunos.

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Por Todos los Medios Salve a Algunos.

Un objetivo de Pablo en hacerse esclavo de todos era para que sean salvos. Él no estaba tratando de ganar un concurso de popularidad. Él no estaba tratando de hacerse o al evangelio atractivo para ellos. Su propósito era evangelístico. CH Spurgeon, predicando sobre 1 Corintios 9, dijo:

Me temo que hay algunos que predican con el punto de vista de hombres divertidos, y siempre que las personas pueden ser reunidas en multitud, y sus oídos puedas sentir cosquillas, y pueden retirarse satisfechos con lo que han oído, el orador está contento y doblan sus manos, y se vuelve satisfecho de sí mismo. Pero Pablo no se estaba a favor del público ni reunir una multitud. Si no los salvaba él sentía que no sirvió de nada el interesarlos. A menos que la verdad había atravesado su corazón, afectado su vida, y los hiciera nuevos hombres, Pablo se habría ido a casa lamentaría: “¿Quién ha creído a nuestro mensaje? ¿A quién se ha revelado el brazo del SEÑOR?”...

Ahora hermanos, hay que observar que si yo, o usted, o cualquiera de nosotros, o todos nosotros, hemos pasado la vida sólo divirtiendo hombres, o educando a los hombres, o moralizando a los hombres, cuando vengamos a dar nuestra cuenta en el último gran día estaremos en una situación muy triste, y tendremos un registro muy lamentable para entregar, porque ¿de qué sirve para un hombre ser educado cuando vendrá a ser condenado? ¿De qué servirá para él que haya sido divertido cuando suene la trompeta, y el cielo y la tierra estén temblando, y el hoyo se abre de par en par a las mandíbulas de fuego y devore el alma no salva? ¿De qué sirve incluso haber moralizado a un hombre, si todavía está en el lado izquierdo del juez, y si aún así, “Apartaos de mí, malditos,” será su parte? (Spurgeon, “Soul Saving Our One Business,” The Metropolitan Tabernacle Pulpit, vol. 25, 674-676)

Ese es precisamente mi preocupación acerca de las estrategias pragmáticas de igle-crecimiento de hoy. El plan es atraer a los no creyentes. ¿Por qué? ¿Para entretenerlos? Para lograr que asistan a las reuniones de la iglesia con regularidad? Simplemente los “reunir en la iglesia” a los sin-iglesia no logra nada de valor eterno. Con demasiada frecuencia, sin embargo, allí es donde los la estrategia se detiene. O si no se combina con un evangelio diluido que erróneamente asegura a los pecadores una “decisión” positiva por Cristo es tan buena como la verdadera conversión. Muchos de los que no son cristianos auténticos, ahora se identifican con la iglesia. La iglesia ha sido invadida por lo tanto con los valores del mundo, los intereses del mundo, y los ciudadanos del mundo.

Por todos los medios vamos a buscar la salvación de los perdidos. Tenemos que ser siervos de todos, deferente con todo tipo de personas. A los Judíos debemos convertirnos en judíos; a los gentiles debemos ser como los gentiles, a los niños debemos ser como niños, y así sucesivamente para cada faceta de la humanidad. Pero el principal medio de evangelización no debemos atrevernos a pasar por alto: la proclamación directa, centrada en Cristo de la Palabra de Dios no adulterada. Los que mercadean la Palabra por entretenimiento o trucos se encontrarán con que no tienen ningún medio eficaz para llegar a la gente con la verdad de Cristo.

Por John F. Macarthur


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